Trabajo final de Posgrado (Especialización en Tributación) -- Universidad Nacional de Córdoba. Facultad de Ciencias Económicas; Argentina, 2018.

Bibliografía: p. 33-34

Las PyME juegan un papel importante dentro de la economía de nuestro país. Impulsan la creación de puestos de trabajo y el crecimiento económico, además de garantizar la estabilidad social.
La definición de lo que se entiende por PyME reviste un aspecto central, ya que delimita la porción de contribuyentes a los que estarán enfocadas las distintas políticas públicas.
Por tal motivo, es necesario remitirse a la legislación de fondo. La ley 25300 indica que la autoridad de aplicación deberá definir las características de las empresas que serán consideradas PyME contemplando, cuando así se justificare, las especificidades propias de los distintos sectores y regiones y sobre la base de algunos o todos los siguientes caracteres o sus equivalentes: personal ocupado, monto de las ventas y valor de los activos aplicados al proceso productivo.
Sin embargo, la reglamentación no ha optado por el criterio antes expuesto, sino que ha elegido el método cuantitativo basado en las ventas totales anuales para la determinación de la categorización como PyME.
Pese a lo expuesto, las PyME, por su propia génesis, requieren de un tratamiento especial en diversos aspectos para mitigar o eliminar los inconvenientes que trae aparejada dicha estructura. Uno de los puntos centrales en la actualidad es el tributario, producto de la alta presión fiscal, lo que influye negativamente en la competitividad de este segmento tan dinámico de la economía.
Como consecuencia de ello, se publica en el Boletín Oficial la Ley 27264 sobre el Régimen de fomento para las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas.
En función de lo expuesto, el presente trabajo centra su atención en una investigación y examen profundo de dicha normativa, revisando los aspectos más relevantes y controvertidos y analizando si esta logra resolver los problemas que atañen a las PyME.